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Texto: Paz Ferreyra Revol – Directora de Zum Apoyo Escolar y Universitario.

No es la primera vez que llega el fin de año y Sofía se “entera” de que su hijo Matías, el segundo de tres, ¡se lleva hasta el recreo!

¿Qué pasó? ¿Por qué tan sorprendida? ¿Qué pensaba con respecto al rendimiento académico de su hijo, a quien se supone conoce mejor que nadie? ¿Esperaba otros resultados?

Se puede decir que esta madre es negadora, “colgada”, desentendida; se pueden decir muchas cosas, sin embargo, esto que experimenta Sofía es algo más habitual de lo que se cree… porque pasa, y mucho.

¿Por qué? Hay muchas respuestas, muchas teorías y varios motivos.

Por un lado, las madres estamos muchas veces superadas, desbordadas y, generalmente, no tenemos un solo hijo, sino dos, tres, cuatro o más, y abarcamos demasiado.

En algún momento queremos soltarlo y soñamos con que solito va a lograrlo, porque ya aprendió el año pasado cuando la pasó tan mal estudiando durante todo el verano. Creemos que ya va a madurar y volverse responsable de una santa vez. Y esto en algunos casos sucede, pero la mayoría de las veces no. O al menos no tan rápido como querríamos, ya que el proceso madurativo puede tardar años y tal vez nunca llegue, al menos en la etapa escolar.

Entonces, empieza marzo, un nuevo año lectivo, un nuevo desafío y una nueva oportunidad. Pero Sofía ya está agotada después del verano terrible que pasó atando clavos, rezando y poniendo velas a su Santo preferido cuando Mati iba a rendir.

Por consiguiente, lo único que quiere (¡y necesita!) es creer que la historia no se va a volver a repetir, ¡porque no da más! Y el resto de la familia, tampoco.

Y llegan los primeros boletines, ya hay materias abajo, pero esta madre prefiere creer en que algo va a cambiar. Habla con su hijo quien, por supuesto, minimiza la situación y promete revertir las cosas para el segundo trimestre, y ella elige confiar.

Ya comenzó septiembre, y el segundo boletín del año se hace esperar. Justo coincide con que Sofía se fue unos días de viaje con su marido y cuando vuelve, ya casi a mitad de mes, recibe una notificación del colegio que le exige el boletín firmado a la brevedad. ¿Pero dónde está ese bendito boletín? Mati, ¿no sabe? ¿No lo encuentra?

Y es ahí donde ella empieza a percibir que ya, casi octubre, es hora de reaccionar, tomar el toro por las astas, pedir una reunión en el colegio, llamar a Zum Apoyo Escolar para que tenga un tutor, y… ¡Cierto! Consultar el avance de notas online que, en el fondo, no se atrevió a mirar en todo el año, a tal punto que se olvidó de la clave para ingresar. ¡Uff! La película de siempre empieza a rodar.

Y una Sofía, totalmente entregada se dice así misma: “Paren el mundo, me quiero bajar”.

 

Contactos

Paz Ferreyra Revol – Directora de Zum Apoyo Escolar y Universitario

FB: Zum Apoyo Escolar

Dirección: Centro Comercial Santa Bárbara Of. 29

Tel: 15-5577-8706 

15-5839-2915

Mail: zumclases@gmail.com

2 respuestas

  1. No entiendo si es la publicidad de ZUM que dice “acá estamos para salvarlas” … la verdad que me parece q hay q tomarlo con más seriedad al tema. Me parece q este artículo no es un aporte a la educación… ni siquiera moviliza a los colegios para q hagan una reflexion de porque tal o cual alumno de lleva tantas materias.
    Una mirada un poco más profunda para saber q pasa con el centro educativo, con la familia o con el alumno, que es quien durante 8/9 hs en muchos casos tiene que estar en el colegio y enfrentando materias q no puede entender … porque ? Muchos motivos…. dificultades de aprendizaje, falta de diagnósticos tempranos, malos docentes e inclusive chicos desanimados… ampliamos nuestra mirada como adultos y ayudemos al cambio. Entusiasmemos a los chicos a estudiar y veamos más allá para ponernos en el lugar del otro.

  2. Por supuesto Mónica que todo lo que propones hay que hacerlo. Esta nota es un aporte que, además, cuenta con el respaldo de tantos alumnos a los que se les ha enseñado método de estudio, capacidad de concentración, comprensión de texto y muchas cosas más. Nos parece que ambas miradas, la que vos exponés, y la que se explica en la nota son necesarias. Gracias por tu comentario y feliz Año!!

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