Una búsqueda de expresión que se transformó en un emprendimiento.

Que una fotografía hable mil idiomas pero que cuente una misma historia fue el proyecto detrás de Taquicardia, una experiencia que conecta la belleza a través de la fotografía y la serigrafía. Sus fundadoras se conocieron estudiando fotografía analógica y la magia de poder participar en el proceso de creación de una imagen las unió. Agnes Lanfranco, Felicitas Bonino y Lola García Berro descubrieron que podían llevar su fotografía a objetos de diseño cotidiano y se pusieron en campaña para lograrlo.

Con estilos bien propios, sus imágenes conviven excelentemente juntas. Ese fue el primer disparador para animarse a mostrar su arte en conjunto. A diferencia de la fotografía digital en la cual hay que sentarse en una computadora a retocar imágenes, la fotografía analógica tiene el valor agregado del proceso artesanal en el cuarto oscuro. “Revelar un rollo o copiar la foto en el cuarto oscuro tiene algo de meditación en movimiento, y se requiere estar muy presente y en comunicación con la imagen constantemente. La oscuridad con la luz roja nos regala un momento muy íntimo y en conexión con uno mismo”, comenta Lola García Berro.

Sumergir el papel en el químico y observar cómo va apareciendo la imagen es algo único y fascinante. A la vez, la fotografía analógica requiere detenerse, ser un agudo observador de lo que se quiere retratar y tener mucha paciencia. “Siempre están esos nervios lindos por averiguar si fui capaz de capturar eso que me hizo latir el corazón”.

El proyecto fue tomando forma cuando vieron la gran respuesta de parte del público. Y ahí empezaron a soñar. Y como las posibilidades de diseño y creación son infinitas, fueron incorporando nuevos productos y tomaron conciencia del enorme poder de la imagen, que con su versatilidad se puede aplicar a muchísimos formatos como el textil, la cerámica o el empapelado. 

Experiencia para palpar la belleza

Con la fotografía como medio para compartir lo simple y grandioso de la naturaleza, hace ya tres años que organizan la muestra Taquicardia como excusa para compartir la belleza de su arte con algún trago, con la presencia de @alerubiocatering y un poco de música. En una de sus casas en el barrio El Encuentro de Eidico, este sábado 7 de diciembre inauguran la tercera muestra Open House con entrada libre y gratuita. Con delicias para almorzar y tomar el té, es un programa imperdible, que además este año contará con demostración de estampado en vivo y muchas opciones para regalar en Navidad. 

Las chicas se emocionan con el progreso durante estos años y la unión que crearon entre ellas. Y si de soñar hablamos, en su wish list figuran un par de pendientes, lindos pendientes: vender en el exterior, que en parte lo lograron este año al sumar sus diseños en una feria en Los Ángeles; tener un taller más grande que sirva también como galería de fotos y local de sus creaciones; y participar de la decoración de un hotel boutique creando una temática aplicada tanto en fotografía como en diseño textil.

Proyectos no faltan, ni tampoco las ganas y el coraje para encararlos. El 2020 será un año de mucho trabajo y metas por cumplir, ¡todo lo mejor para ustedes chicas!