El 21 de marzo comienza el otoño y aparecen los colores rojizos, anaranjados, con amplias tonalidades de amarillos. Toda la naturaleza conspira para avisarnos que pronto llegarán los días y las noches más cortas y frías del año. En esta época es cuando, teniendo en cuenta ciertas pautas y consejos, podemos trabajar en nuestros jardines realizando tareas de mantenimiento, siempre protegiendo nuestras manos con un buen par de  guantes.

Césped: las malezas son esas plantas que crecen en el lugar equivocado. Solemos encontrarlas en el césped sin importar la variedad: siempre están, anuales o perennes. El otoño es la época ideal para eliminarlas con herbicidas sistémicos o totales. Una vez aplicados, dejarlos actuar durante dos o tres días. Luego, rastrillar eliminando así las malezas muertas.

Micronivel otoñal: con mantillo arenoso eliminado los pozos y mejorando el nivel y drenaje del césped.

Resiembra: después de Semana Santa viene la mejor época para resembrar el césped con semilla anual o perenne. La fertilización la haremos cuando la semilla haya brotado alrededor de cinco a diez días con Nitrofoska azul granulado.

Hojas secas en el césped: con un rastrillo de dientes flexibles juntaremos las hojas esparcidas sobre el césped. Si bien  nos brindan  color en otoño, perjudican al césped. Podemos recogerlas y guardarlas en un recipiente de alambre para transformarlas en humus de hojas.

Riego: disminuir la frecuencia. Sólo regaremos con la resiembra, para producir humedad por cinco días seguidos ya que las semillas brotan por humedad y no por encharcamiento de agua.

Poda y despunte: los arbustos ya florecidos en el verano necesitarán ser podados, eliminando con este método sus zonas muertas o secas. Las  varas florales de hemerocalliz, agapanthus, coreopsim, lirios, tulbalgias, debemos eliminarlas desde su base.

Si lo que buscamos es tener semillas, entonces es el momento de plantarlas, caso contrario, los nutrientes de la tierra se reservarán hasta la primavera. Cuando realizamos una poda suave, la llamamos despunte, por ejemplo: rosales, coronas de novias, abutilon, jazmines o con florales de estación.

Recambio floral: bajan las temperaturas y las noches son más frescas. El sol no quema tanto. Comienza el otoño y el frío trae el recambio floral. A las alegrías del hogar las reemplazaremos por violetas de los Alpes o primulas; a las petunias por violas. A algunas sólo les reforzaremos la mata (allisum y geranios).

Los árboles con zunchos deberán estar firmes, chequear los tutores, ya que los próximos vientos los harán bailar. Limpiar las ramas secas y podar los tocones con  una moto sierra para jardinería con excelente potencia. Luego, sellar las heridas con cicatrizantes especiales que podemos adquirir en los viveros. Cuando extraemos un árbol o arbusto para ser reemplazado por otro, es muy importante renovar el sustrato a la hora de plantar con materia orgánica o humus.

Bichos: las orugas en el césped son consecuencia de la invasión de la polilla de la noche. Se combaten con cipermetrina o clorpirifos (clorpirifos al 20%, pasto bien corto, se debe hacer a la mañana temprano o a la tardecita, cuando el sol no pegue fuerte para evitar que queme el pasto). Una hora después de la aplicación, regar con lluvia fina y poca cantidad de agua. Con una aplicación debería ser suficiente; para mayor seguridad se puede hacer una segunda aplicación a los siete días. Aplicar preferentemente con pulverizador manual.

La mosca blanca y cochinilla son insectos chupadores que toman la savia de las planta. Ejemplo: jazmín del cabo y pimpollo floral. Se combate con DIMETOATO diluyendo 24 gotas en un litro de agua, repetir durante siete días. Pulverizar los hongos comunes en el césped y las plantas con funguicidas. Una vez aplicados, desaparecerán a la mañana.

Macetas: regar en lo posible con agua de lluvia o destilada, ya que el agua potable viene con mucha cal. Abonaremos en esta época con materia orgánica, controlar el drenaje, cubrirlas con musgos o hips. No olvidarse de retocarlas cada treinta días para evitar así que formen espalda.

Canteros: el otoño es la mejor época para renovar nuestros canteros. Debemos dividir las matas que tengan ya tres años. Los lirios, agapanthus y hemerocalliz son las plantas indicadas para formar parte de los canteros. No olvidarse de podar tres cuartas partes del follaje para lograr así que la mata transpire menos y largue raíces más rápido. Armar los canteros nuevos y los viejos con mucha tierra negra abonada. Las anémonas japónicas estarán en flor, pero una vez que termina, las podamos y en la primavera las dividimos. La anémona japónica es ideal para zonas húmedas con media sombra rica en PH ácido. Las flores son de color rosa o blanco y aparecen justo para las Pascuas, por eso en Europa la llaman pascualina.

Texto:
MARÍA LAURA VIDAL BAZTERRICA

Paisajista
(15) 4991-6073
FB: María Laura Vidal Bazterrica
marialauravidal@hotmail.com

Fotos:
Pachu Tufro